Para nuestros lectores, es común que alguna vez en nuestra vida hayan escuchado el tema de «Los valores» siendo así el conjunto de virtudes que posee una persona, esto permite que se desarrolle como individuo, además guiando su comportamiento.
En este post explicaremos la clasificación de los valores y algunas de sus características fundamentales, lo cual te permitirá comprender y explicar el tema con mayor profundidad, inclusive descubrirás que hay tipos de virtudes que ni siquiera conocías.

Tabla de Contenidos
- 1 ¿Qué son los valores? Características de los valores fundamentales
- 2 ¿Cómo se clasifican los valores?
- 3 Teoría de Allport, Vernon y Lindzey sobre la clasificación de los valores
- 4 ¿Se están perdiendo los valores?
- 5 Diferencias entre principios y valores
- 6 Bibliografía
¿Qué son los valores? Características de los valores fundamentales
Al hablar de los valores nos referimos a las convicciones más profundas de una persona, estos determinan la actitud y conducta del individuo. Ya que son los principios que orientan y guían el actuar del hombre desde las tempranas fases de la vida.
Los valores por sí mismos son bien vistos por la sociedad, es decir, se aceptan y se agradecen dichos gestos, acciones o pensamientos, ya que facilitan la convivencia entre los distintos miembros de una comunidad. Sin embargo, hay que destacar que existen los valores fundamentales, los cuales poseen ciertas características.
Lo primero a mencionar es que los valores fundamentales como su nombre lo indica son los más importantes para el individuo, son la base de su formación y son los más aceptados y vistos por la sociedad.
Este tipo de virtudes tienen la cualidad de ser extremadamente durables, ya que con el paso del tiempo, jamás van a desparecer, además, son muy flexibles, debido a que se les da mayor importancia a medida que se crece.
¿Cómo se clasifican los valores?
Los valores son extremadamente complejos, de por sí al existir tantos la mejor forma de dividirlos es según la cualidad en la que más se enfocan o en su defecto en qué parte de la vida son más representativos y determinantes. A continuación se detallaran cómo se clasifican los valores.
Valores vitales
Aquí entran los valores más básicos del humano, ya que responden a nuestras necesidades fisiológicas y biológicas según la situación lo amerite, la función de los mismos es satisfacer nuestros instintos, condiciones orgánicas y reproductivas. Este tipo de virtud se enfoca en salvaguardar y proteger todo lo que nos importa, desde lo más indispensable que es la vida.
Valores económicos
Los valores económicos se refieren a todos esos estados de necesidad que deben ser cubiertos en el humano, es decir, la forma en la cual se asegura el estatuto social, un bien o una posición. Aquí se encuentra la abundancia de los servicios y otros activos, así como la escasez de los mismos. Si esta necesidad se logra satisfacer, es probable que una sensación de seguridad sea permanente en el individuo.
Valores intelectuales
Son aquellos que buscan la verdad, pero de la forma más general posible, es decir, es la capacidad de que una persona pueda tener una perspectiva, sea capaz de identificar mentiras, puntos de vista distintos a los propios. Aquí también entra el poder concentrase, establecer prioridades, entre otros.
Valores cognitivos
A diferencia de los intelectuales, los cognitivos se encargan de encontrar un rumbo en nuestro conocimiento, es decir, bajo qué ideal vamos a estudiar, de hecho son vitales, ya que nos permite saber qué carrera vamos a elegir en el futuro. Eso sí, este tipo de valor tiende a desarrollarse en la adultez, una vez tengamos nuestra vida encaminada.
Valores estéticos
Aquí nos referimos a los valores que están enfocados en la belleza, lo agradable y no aceptado por nuestros sentidos, pero son percibidos de forma integral. La estética en esta ocasión no entra en indicar cuáles son los estándares actuales, sino a nivel cultural, la limpieza sobre uno mismo, el cuidado que nos tenemos, etc.
Valores sensoriales y sensuales
Aquí nos referimos a los valores que buscan el placer, pero no se limita netamente al ámbito sexual, sino la libertad del individuo, la forma en la cual buscamos estar cómodos con nosotros mismos y desarrollar esa cualidad en las relaciones. Para así lograr la realización personal y estar identificados con la naturaleza y esencia de los demás.
Este es uno de los más comunes, son el conjunto de normas o comportamientos cuya finalidad es encontrar el bienestar de la colectividad, es decir, son un conjunto de normas de convivencia, para poder estar en paz y tranquilidad con nuestros iguales. Estas virtudes tienen una ejecución continua y están presentes en nuestra vida cada día.
Valores afectivos o emocionales
Aquí entran los comportamientos que debamos realizar ante una situación en concreto, para así llegar a un estado de serenidad y bienestar propio, pero además esto beneficiará a los demás en nuestro alrededor.
Este tipo de valor es muy particular, ya que entra en sí la percepción de una persona, además de cómo visualiza a todos aquellos a su alrededor, creando así la asertividad, toma de decisiones y control de emociones.
Valores institucionales
Son el conjunto de principios que apoyan la visión de una organización, esto permite que se desarrolle a futuro la misión y la cultura empresarial, reflejando así los estándares de la asociación. La compañía que sí desee crecer, deberá aplicar una ideología concreta, además sus colaboradores deberán tener en cuenta este tipo de ideales a la hora de ejercer sus funciones.
Valores culturales
Representan aquellas creencias, lenguas, costumbres, tradiciones que identifican a una sociedad o grupo de personas en concreto. Los mismos se van transmitiendo de una generación a otra con el pasos de los años, a pesar de que al día de hoy el mestizaje es común, ese conjunto de ideales siempre será representativo en el individuo, inclusive si se encuentra en otra región.
Valores éticos y morales
Los valores éticos y morales son todas las virtudes que nos permiten diferenciar lo bueno de lo malo, lo justo e injusto de una situación en concreto. Al desarrollar esta capacidad el individuo podrá determinar su actitud y comportamiento en cualquier circunstancia. Hay una serie de principios de este tipo que son más relevantes, entre ellos tenemos:
Bondad
Es el deseo de hacer bien, tener buenas intenciones con el resto, ser amable, ayudar a cualquiera que lo necesiten siempre y cuando está en nuestra posibilidad, eso sí, sin esperar nada a cambio.
Sinceridad
Es la capacidad de vivir y relacionarse con los demás sin intenciones ocultas, es decir que nuestros actos y palabras son transparentes y jamás existirán segundas intenciones.
Empatía
La empatía es aprender a ponerse en la situación de nuestros semejantes, esto permitirá entenderlos, comprenderlos y así ayudarlos cuando sea necesario.
Amor
Es el motor que mueve todo en el mundo, es la fuerza que nos permite convivir, compartir, respetar, confiar en los demás, brindar alegría y optimismo a las personas.
Paciencia
Es la capacidad de tolerar una incomodidad o preocupación, comprender que hay problemas cuya solución tardará, es la fuerza que nos permite lograr aquello que deseamos aunque se vea lejano.
Gratitud
Implica ser agradecidos por todo lo que la vida nos ha brindado, ya que cada vez que uno agradece lo que recibe, siempre vendrá una mayor recompensa en el futuro. Agradecer tanto a la vida como a las personas que nos apoyan.
Perdón
Es la capacidad de aceptar nuestros errores o el de los demás, disculpar a alguien abre paso a nuevos caminos, nos empodera como personas, la relación podrá dar paso a un nuevo nivel.
Humildad
La humildad es aceptar nuestros principios, conocer los límites y debilidades que poseemos, comprender que no somos más que los demás.
Responsabilidad
Es la capacidad de aceptar nuestros deberes, compromisos y obligaciones con los demás. A pesar de que la tarea en sí sea complicada, el cumplimiento de la misma permitirá que los demás tengan una visión favorable sobre nosotros.
Solidaridad
Es el sentimiento y principio que permite que ayudemos a cualquier persona, bajo cualquier circunstancia, inclusive cuando para nosotros parezca complicado, se comprende que el ser que solicita el apoyo está en una condición más difícil.
Teoría de Allport, Vernon y Lindzey sobre la clasificación de los valores
El tema de los valores ha generado muchísimos estudios entre distintos profesionales en el campo, tanto así que se han planteado hipótesis, una de ellas es la teoría de Allport, Vernon y Lindzey sobre la clasificación de los valores, la cual es un test con el objetivo de evaluar las motivaciones básicas de cada individuo.
El test consta de dos partes, la primera posee un conjunto de preguntas dicotómicas, por ejemplo, dentro del cuestionario se preguntaría cuál es el tipo de libro de preferencia del individuo y la persona que está respondiendo tendrá una serie de opciones a elegir. Luego en la otra mitad de la prueba las siguientes interrogantes se deben ordenar en función del grado de preferencia del sujeto.
El test es bastante extenso, tiene más de 240 elementos y el objetivo es determinar qué tipo de principio se refleja más en la vida del participante, entre las opciones tenemos los valores teóricos, económicos, estéticos, sociales, políticos y religiosos.
¿Se están perdiendo los valores?
Esta es una frase que se escucha muchísimo a diario, «Los valores se perdieron» la realidad es que este comentario se complementa con una serie de estadísticas que hacen reflejar que la sociedad está sumida en caos, pero la realidad es que hay que analizarlo desde un punto de vista neutral.
Las generaciones anteriores vivían en un mundo muchísimo más violento que el de ahora, había guerras que es uno de los antivalores cuya huella ha dejado estragos en la sociedad, las mujeres no tenían los derechos que poseen al día de hoy, la homosexualidad era un delito grave, el racismo era constante.
Al día de hoy, los valores siguen existiendo, quizá ya no son los mismos, porque la realidad es que ciertas cosas que se percibían en el antaño como positivas al día de hoy son deplorables.
Las campañas de concientización son más comunes, el apoyo y solidaridad está más presente, una situación que pasaría desapercibida años atrás, ahora es recriminada en la sociedad. La respuesta en pocas palabras es que en la actualidad, vivimos en un mundo lleno de valores, a pesar de que cierta cantidad de personas no los aplique, son muchos los que si lo hacen.
Diferencias entre principios y valores
Es muy común usar la palabra valores como sinónimo de principios, de hecho son extremadamente similares, pero la realidad es que ambos son una serie de conceptos que ponemos en práctica en nuestro día a día para vivir de una forma igualitaria en la sociedad, pero además aseguran la paz con nosotros mismos.
La definición de principios es vital, ya que aquí nos referimos al conjunto de creencias universales que tienen el objetivo potenciar el desarrollo humano y asegurar que todos vivan en armonía. En sí los principios son universales y jamás dependerán de una condición o interpretación para ser entendidos.
Por otra parte, los valores a diferencia de los principios están relacionados a la personalidad y la forma en la cual se aplican es en base al compromiso propio de la persona. Es decir, que existen valores que no son respetados por algunos seres humanos o en su defecto jamás han tenido un compromiso con ellos.
Bibliografía
María Guadalupe Ramos (2000). Programa para educar en valores.
Jorge Yarce (2006) El poder de los valores en las organizaciones. Susan C. Cloninger (2002) Teorías de la personalidad.